
La noche estuvo genial. Aunque Beckam decía (bueno, yo no se lo que decía, por que lo hacía en alemán, pero, el hispano, me traducía…) Que todos los pubs estaban llenos y que si íbamos a una disco, al final encontramos un pub llamado “besitos”, una cadena de bares españoles, pero que no ponen problemas en quedarte por la noche a tomar algo…
Allí nos reímos muchísimo. No de nada en especial. Las típicas conversaciones de una noche entre colegas.
Les dio por beber cubatas, y claro, la diferencia de precios es abismal. Además de que teniendo cerveza, para que vas a tomar un whisky (ya lo se señor groucho, usted lo prefiere…).
No podía irme de Alemania sin conseguir una foto de una típica alemana. Pensé que la camarera, podría ayudarme. No se, no era algo fácil por que los alemanes, como ya ha dicho el hispano, no había quien los entendiera, pero me la jugué.
Cuando trajo la tercera o cuarta ronda de cervezas, muy amablemente y poniendo cara del perro más desvalido que podrías encontrar en la calle le pedí una foto.
No me entendió.
No se si por que esperaba que hablara en Alemán, o por que llevaba unas cuantas cervezas…
El caso es que era tan genial que esperó a que el hispano se lo tradujera. Así salio esta foto, que en mi cara se traduce que no me lo podía ni creer, jeje.

A la mañana siguiente un desayuno típico alemán. De verdad que cada vez me cuadran más las cosas, por que las salchichas tenían una pinta… grasa pura.
Fue una autentica pasada.
Gracias hispano. Ha sido un verdadero honor y placer.
Cuenta conmigo, para cualquier aventura.