miércoles, agosto 29, 2007
Cuando tienes un esguince todo cambia…
Menudo descubrimiento… jeje.
El tío listo que nunca me saluda, hoy se paro a preguntarme que tal:
- Pero, ¿Qué te ha pasado?
- Ya ves… un esguince.
- ¿y lo tienes para muchos días?
- No que va… Termino hoy. En teoría ya no tengo por que andar con muletas, pero no quiero forzar el primer día…
- Haaa…. Pues que te recuperes pronto
- ¡Gracias!
Y la misma retahíla cada poco… y encantado de hacerlo!! Tienes la oportunidad de hablar con un montón de gente que si no fuera por eso no los conocerías. Y ellos de conocerte a ti. A la gente con la que tienes más confianza, hablas un poco más. Luego están los típicos que necesitan contar algún chiste sobre ello: “ya decía yo que el deporte no era muy sano…”.
Los que te preguntan como fue, y como solucioné las primeras horas.
Hoy incluso uno me preguntó si me dolió mucho. Y me parece genial.
Además, todo el mundo te abre la puerta, o te parta la silla.
Un compañero me lleva y me trae al trabajo.
Xara me hace la compra.
Y como he tenido que descansar… pues he hecho lo propio… descansar un puñao.
Con el blog, las llamadas para ver como estaba se han multiplicado (Gracias a los que me habéis llamado).
Total, que además de tener un montón de gente súper cordial hacia ti… encima ayudas a la gente a que te pueda ayudar… Y eso es genial. Siempre les digo a mis nanos, que mejor que recibir, es dar, y por tanto, mejor que te ayuden, es ayudar. Este accidente ha hecho que mucha gente me ayude. Y yo tan contento.
No se si soy demasiado positivo, pero creo que he aprendido un montón de haber tenido el esguince… ya ves.
(pero no le recomiendo a nadie que pruebe la experiencia…).
Besitos.
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