ROSQUILLETA en Barcelona

lunes, septiembre 15, 2008

intento al Aneto

Este finde me fui con un colega y su perro a intentar subir el Aneto.

Nos fue imposible. La nieve nos golpeaba en la cara devido a la fuerte ventisca y cuando nos dimos cuenta que no veiamos a mas de dos metros y empezamos a perder sensibilidad en los dedos del frio, vimos claro que teníamos que bajar, y rapidito...

El perro en cambio estaba feliz. Saltaba de un lado para otro y retozaba en la nieve. parecía que le daba lo mismo seguir subiendo que bajando:

- No es así- me dijo una montañista con la que hablé-. Lo que pasa es que el perro no es consciente de su situación. No sabe si le quedan 5 horas de subida y 8 más de bajada. El disfruta el momento.

A veces dan ganas ser perro.

P.D.: No tentgo fotos por que se nos jodió la cámara. Aunque tampoco había mucho que ver.

Un cálido abrazo.