ROSQUILLETA en Barcelona

miércoles, octubre 10, 2012

sin miedo a nada

La edad nos conduce a los miedos. De hecho leí en un libro de estos de psicoanálisis que son tres o cuatro etapas las que vive la gente (en general, hay gente que se queda en la primera...):

1) la adolescencia. Sin miedos. Al no tener responsabilidades, la preocupaciones se minimizan, y se vive todo intensamente. Por contrapartida son más impulsivos, tienen que aprender a controlarse y sobre todo a dar el valor de las cosas que merecen. (Que tengas que salir a cenar con tus padres no te matará...).


2) madurez. Con mayor libertad, conlleva a una mayor responsabilidad y esto preocupa al 90 % de las personas. El como llegar a final de mes, cuando tienen la solución clara, por ejemplo, o que sucedería si me fuera a una isla desierta a vivir, cuando también sabes la respuesta. Miedos. creo que es la etapa con más miedos, cuando la mayor parte están infundados.

3) vejez. Suponiendo que hemos superado esos miedos, nos creemos invencibles y es cuando llega el egocentrismo. El tener la vida medio resuelta y el "eso ya lo he vivido y solucionado yo", los confieren en el animal egocéntrico por excelencia. Una lástima tirar por tierra todo el trabajo hecho. Con lo que mola la humildad.


Bueno, que sea como sea, Cuanto antes superemos nuestras debilidades, antes seremos felices.

Un cálido abrazo

2 comentarios:

ohdiosa dijo...

Yo antes estaba convencida de que el miedo era un mecanismo de autodefensa que nos hacía estar alerta ante cualquier posible "ataque" y anticiparnos al él...ahora lo veo como una traba, como el gran problema que nos impide hacer, decir y pensar lo que nos de la gana... creo que he retrocedido un paso, y he pasado de la madurez a la adolescencia!!!

dM dijo...

Es un placer volver a leerte!
Creo que no es cuestión de no tener miedo (eso es ser un inconsciente, más que un valiente), ya que eso nos vuelve temerarios, pero si conseguimos asumirlos y superarlos eres capaz de crecer y avanzar.
Un saludo!